Amanece en el albergue, después de una noche movida, algunos han dormido muy poco porque les gusta mucho la juerga. Como cada año (para dolor de nuestros oídos), la canción que nos recuerda el orden de las prendas para vestirnos y bajar a desayunar. Hacer las camas y recoger las habitaciones (dura misión para algunos), y sin más a la pitanza.
Han devorado el desayuno y decían estar dormidos o les gustaba mucho porque había menos ruido.
Después de lavarnos los dientes y un rato de tiempo libre, hoy tocaba talleres rotativos sobre: fauna, flora y desarrollo del entorno. Mientras tanto los profeso hemos aprovechado el día soleado, a pesar del frío, -11,5 grados (mínima del año); para ascender la cumbre del Mencilla. ¡Lo hemos conseguido, casi sin esfuerzo!
La comida ha discurrido sin nada respetable. Después de un rato de tiempo libre, preparados para... ¡¡pisar nieve!! Hoy la visita era a la teja Patricia, con una paradita después de conocer su historia, para "culear" por la nieve-hielo.
De vuelta al albergue un rico bocata nos estaba esperando, unos juegos y ¡duchas! Como teníamos muchas ganas de llamar y practicar en el futbolín para intentar ganar a los profeso (les faltan horas de vuelo para ganarnos), han sido rápidas y hemos organizado las habitaciones para ganar la estrella del día.
La cena nos ha gustado porque olía a fritanga, lo que no esperábamos era el primero... ¡judías verdes y con ajo! Una vez terminada y dados los premios del día una expedición de los mejores encargados de mesa ha salido del albergue a "ver constelación" (es un secreto, pero sabemos que van a dar de comer a los animalitos que tenemos por vecinos).
Buzón del amor y la amistad, con mensajeros "interesantes" y como cada noche velada, hoy Rommel contra Montgomery, juego de estrategia por equipos.
Segundo día a punto de acabar, nos vamos a la cama, esperemos que con más sueño que ayer y la noche sea tranquila.
Hast mañana, desde Valle del Sol.
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